Plan Hidráulico del Noroeste Siglo XXI

E s t a d o s  d e  N a y a r i t ,  S i n a l o a  y  S o n o r a

Objetivos: Abasto de Agua, Producción de Energía, Irrigación, Control de Inundaciones, Navegación, Turismo, Piscicultura, Acuicultura, Recarga de Acuíferos.

Reflexionar que desde el siglo pasado existe la aspiración de los habitantes del noroeste del país por consolidar y extender los lazos de cooperación entre los estados de Nayarit, Sinaloa y Sonora, mediante la ejecución de ambiciosas obras de infraestructura hidráulica para transferir grandes volúmenes de agua desde la cuenca del río Santiago hasta las cuencas de los ríos Mayo y Yaqui. La intención central es recuperar y acrecentar la producción de alimentos, además del suministro de agua a actuales y futuras ciudades y poblaciones, generar energía eléctrica, fomentar el turismo, la piscicultura y la acuicultura; objetivos que tornan prioritario revisar con renovada visión y mentalidad el desarrollo del sui generis proyecto de infraestructura básica denominado Plan Hidráulico del Noroeste Siglo XXI (Plhino).

Conforme a esta perspectiva-expectativa de progreso comprometido-compartido, las acciones, planteamientos, programas y obras públicas necesarias para concretar uno de los proyectos más representativos del México moderno, deben sustentarse en conceptos innovadores, sencillos, prácticos y viables para transitar de las ideas, propuestas y los planes iníciales, a un versátil programa de acción que involucre las características y condiciones fisiográficas de la Sierra Madre Occidental; que por su formación -escarpadas montañas, ríos torrenciales, acceso difícil…- demandan criterios de proyecto y diseño no-convencionales que garanticen obras económicas, seguras, productivas y de alta participación.

De modo que el deseo siempre expresados por los habitantes del noroeste -en especial por los sonorenses- de disponer con abundantes caudales para aprovechar las vastas tierras del centro-sur de Sonora en las actividades agrícola y ganadera y, contribuir así, a recuperar la autosuficiencia alimentaria en la nación, se materializará con fundamentales obras públicas para impulsar el desarrollo interestatal. Además, al hacer realidad este indispensable y trascendental proyecto se fortalecerá la unidad regional y nacional, se optimizará el uso, transformación y beneficios de los recursos y riquezas naturales y se dará preferencia a las actividades productivas y los trabajos constructivos con el consecuente progreso general en el país.

Para su consecución se necesitan acciones útiles y decisiones importantes traducidas en obras hidráulicas de gran magnitud que permitan controlar, regular, almacenar, transferir, conducir y distribuir parte de los escurrimientos de los principales ríos de la vertiente del Pacífico-Norte. Las presas, que se interconectarán por medio de túneles, se localizarán en las entrañas de la Sierra Madre Occidental, las cuales al crear lagos artificiales en profundos e inhóspitos cañones, facilitarán la comunicación fluvial para aprovechar de manera racional y responsable las riquezas y recursos naturales de esta quebrada zona montañosa.

Por lo que al conceptuar y planificar los proyectos y obras de infraestructura hidroenergética con índices técnico-económico cercanos al máximo y con alta participación social-productiva se asegurará que sean un auténtico y rentable negocio para el país, los inversionistas y los productores. De acuerdo a estas normas y condiciones a continuación se presenta lo esencial del Plhino por entidad federativa:

Estado de Nayarit   Dentro del contexto general, es el estado clave para la factibilidad, desarrollo, aprovechamiento y transferencia de los escurrimientos de los ríos Santiago, San Pedro Mezquital y Acaponeta. Debido a las restricciones del Proyecto Hidroeléctrico (PH) Aguamilpa (esta obra tuvo que ser casi el doble de su altura para hacer asequible el Plhino en su extremo sur), el río Santiago con caudal promedio de 250 m3/s, infortunadamente no puede ser considerado para su trasvase. Aún así, sus valiosos volúmenes se destinarán para abastecer a futuros centros urbanos, industriales y agropecuarios del Complejo de Desarrollo del Pacífico Occidental (agua suficiente para 60 millones de habitantes) y reemplazar en la planicie costera los caudales que se trasvasarán de los ríos San Pedro y Acaponeta.

Ante estas circunstancias, las obras empezarán en el río San Pedro con la Presa de almacenamiento y derivación Ixcatán, situada a 20 km al oriente de la población Estación Ruiz. La disyuntiva es, si se derivan sus escurrimientos por medio de un túnel de 17 km al PH Aguamilpa para duplicar su producción de energía o se trasvasan parte de los volúmenes del río Santiago a la presa Ixcatán (sentido inverso) para derivarlos por medio de bombeo a la Presa Rodrigo por ubicarse a 60 km aguas arriba de la Presa Ixcatán.

Es decir, si a futuro se decide derivar volúmenes adicionales del río Santiago para incorporar 650 000 ha al riego, las pérdidas de energía eléctrica en el PH Aguamilpa se compensarían ampliamente con el nuevo PH Nayar sobre el río Huynamota. Esta obra de alta rentabilidad tendrá una producción constante (1440 GW·h por año), con mejores coeficientes energéticos que el PH El Cajón y el PH La Yesca, aunado a que incrementará-reforzará notablemente la disponibilidad de electricidad en al zona sur del Plhino.

Así, el PH Nayar al situarse a 30 km al este-noreste del PH Aguamilpa, optimizará el aprovechamiento de los escurrimientos de la cuenca del río Santiago; por lo mismo, no tendrá problemas por los usos del agua -como sucede con el PH El Cajón y a futuro en el PH La Yesca- y su amplio embalse garantizará una continua operación, conceptos energéticos que lo convierten en un atractivo proyecto hidroeléctrico.

En consecuencia, la primera obra hidráulica con participación plena en la parte sur del Plhino será la Presa Rodrigo por construirse sobre el río San Pedro. Al formar un largo, estrecho y profundo lago artificial en zonas muy abruptas, se podrán derivar del orden de 80 m3/s a través de un túnel de 21 km de longitud (todos los túneles de intercomunicación entre las distintas presas, serán de sección circular y diámetro interior entre 6.50 m y 7.50 m para facilitar su construcción y asegurar un buen funcionamiento) al embalse de la Presa Carolina por construirse sobre el río Acaponeta, obra que se localizará a 60 km al norte-noreste de la población del mismo nombre. También si resulta conveniente, podría construirse el PH Tenepanta (distante a 20 km aguas abajo de la Presa Carolina) para ampliar la producción hidroeléctrica.

Estado de Sinaloa   El túnel de 31 km que unirá el embalse de la Presa Carolina con la Presa Patricia sobre el río Baluarte -esta obra se ubicará a 35 km al noreste de la población El Rosario-, facilitará cruzar una de las zonas más accidentadas de la Sierra Madre Occidental para conducir un caudal conjunto de 115 m3/s al lago artificial de la Presa Patricia (río San Pedro: 80 m3/s y río Acaponeta: 35 m3/s). De la Presa Patricia, el trasvase continuará mediante un túnel de 33 km para atravesar el parteaguas entre los ríos Baluarte y Presidio. El caudal promedio por conducir será de 160 m3/s (el río Baluarte aportará 45 m3/s) al embalse de la Presa Paola sobre el río Presidio, distante a 63 km al noreste del Puerto de Mazatlán.

De la Presa Paola, el trasvase seguirá a través de un túnel de 30 km que enlazará esta obra hidráulica con el lago artificial de la Presa Fernanda por construirse sobre el río Piaxtla, la cual se localizará a 80 km al norte del Puerto de Mazatlán y a 8 km al noreste del municipio de San Ignacio. El caudal combinado en tránsito será de 185 m3/s (el río Presidio contribuirá con 25 m3/s) más la aportación propia del río Piaxtla  -35 m3/s- se dispondrá con un total de 220 m3/s (suficientes para regar 700 000 ha) que se controlarán y almacenarán en el amplio embalse de la Presa Fernanda. De modo que estas cinco presas por construirse en zonas sumamente escarpadas e interconectando sus estratégicos embalses con grandes túneles serán:

Entidad Río Presa a
Nivel Máximo, msnm b Longitud del
Túnel, km c
Trasvase
m3/s d
Nayarit-Norte San Pedro Rodrigo 570 80
Nayarit-Norte Acaponeta Carolina 520 21 115
Sinaloa-Sur Baluarte Patricia 470 31 160
Sinaloa-Sur Presidio Paola 420 33 185
Sinaloa-Sur Piaxtla Fernanda 370 30 220

a   La altura de las presas varía entre 160 y 200 metros. Todas estas obras serán de concreto-gravedad, emplazadas en sitios muy estrechos, lo cual permitirá reducir los tiempos y costos de construcción.

b   En este tramo inicial del Plhino el sistema de interconexión-derivación funcionará por gravedad.

c   La longitud total de túneles será de 115 km, lo cual representa la tercera parte respecto a la alternativa por medio de canales, aunado a que esta conducción exige múltiples diques, puentes y bombeo.

d   Los volúmenes almacenados en la Presa Fernanda equivalen al 75% de los caudales disponibles en el norte de Nayarit y el sur de Sinaloa, que serán los caudales por conducir a Sinaloa-Norte y Sonora-Sur.

De manera que la construcción de las cinco presas entre los ríos San Pedro y Piaxtla, serán las obras de infraestructura básica para la viabilidad técnica-económica-social-política del Plhino. Al aprovecharse casi 7 000 millones de metros cúbicos y dejar el caudal necesario en las planicies costeras de Nayarit y Sinaloa-sur (80 m3/s) para las diversificar las actividades agrícolas, acuícolas y piscícolas se podrá conducir este volumen sin ocasionar conflictos por los usos del agua hacia la zona noroeste.

Para evitar detenciones e intereses ajenos, es imprescindible establecer y respetar acuerdos, compromisos y convenios entre las tres entidades, donde Nayarit será el estado que aporte el mayor volumen de agua y energía hidroeléctrica, Sinaloa con la función primordial de facilitar el tránsito de los caudales por su territorio y utilizar sólo el agua complementaria para reforzar-ampliar sus distritos de riego y abastecer a las poblaciones y ciudades que lo requieran y Sonora, que promueve y anhela la consecución del Plhino, agregar enormes extensiones de fértil y sedienta tierra de su parte sur a la producción agropecuaria.

De alcanzarse una responsabilidad compartida, será posible destinar 30 m3/s para incorporar al riego las tierras comprendidas entre los ríos Baluarte y Piaxtla -alrededor de 100 000 ha-, así como abastecer de abundante agua a las poblaciones actuales y futuras ubicadas en la zona norte del Complejo de Desarrollo del Pacífico Occidental, entre las que destaca el Puerto de Mazatlán, a fin de consolidar, extender y multiplicar sus actividades turísticas-comerciales. Es necesario reiterar que todos los canales y acueductos en esta parte del Plhino operarán por gravedad, diseñados con criterios de optimización de recursos.

Sin duda, con las presas Rodrigo, Carolina, Patricia, Paola y Fernanda, enlazadas a través de túneles (esta obras subterráneas también captarán grandes volúmenes de agua freática al funcionar como galerías de infiltración, lo cual aumentará los caudales trasvasados a los subsiguientes embalses y compensarán las derivaciones y usos regionales), adquieren una posición especial en la concepción general del Plhino, pues sus aportaciones y almacenamientos se emplearán para diversificar los objetivos de este actualizado plan, como lo será el abasto de agua, la producción de electricidad, el control de inundaciones, el turismo, la navegación, la piscicultura y la acuicultura, iniciándose así una moderna era de progreso interestatal.

Ahora bien, para continuar hacia la zona centro del estado de Sinaloa se presenta la disyuntiva de unir con un túnel la Presa Aurelio Benavides sobre el río Elota y perder presión, con lo cual se limitaría la conducción o bien, construir una nueva presa de almacenamiento-derivación sobre este río para conservar la carga hidrostática y evitar posteriores bombeos. Con esta última alternativa la Presa Corochis (nivel máximo del agua: 320 msnm), distante a 43 km al noreste de la cabecera municipal La Cruz y 18 km aguas arriba de la Presa Aurelio Benavides se uniría con la Presa Fernanda a través de un túnel de 26 km.

Así se mantendrá una interconexión desde el río San Pedro hasta el río Elota sin consumos de energía de bombeo y contar prácticamente con el mismo caudal original (220 m3/s), ya que los volúmenes utilizados entre los ríos Baluarte y Piaxtla se recuperarán con las captaciones de agua subterránea de los túneles-galerías del sistema de transferencia. También la Presa Corochis, apoyará-aumentará, por su mayor elevación y almacenamiento, las tierras del distrito de riego entre los ríos Elota y San Lorenzo.

En la siguiente etapa del trasvase las condiciones de proyecto cambian completamente por la complicada orografía de las cuencas, lo cual se traduce en grandes obras hidráulicas -superficiales y subterráneas- sobre los ríos San Lorenzo; Culiacán-Tamazula y Culiacán-Humaya. A partir de esta última subcuenca, la posible Presa Guatenipa (quedaría a 32 km aguas arriba de la Presa Adolfo López Mateos) podría funcionar como un nuevo proyecto hidroeléctrico para hacer atractiva esta solución o bien, derivar los volúmenes en tránsito hacia la cuenca del río Sinaloa mediante un bombeo de 600 m y conducción de 35 km -incluye tres pequeños túneles- para cruzar el parteagua común entre los ríos Culiacán-Humaya y Sinaloa.

Una vez que el caudal trasvasado fluya por el río Sinaloa se requeriría otra obra hidráulica sobre este río: La Presa Toahayana por situarse a 36 km al noreste de la Presa Bacurato, la cual también tendría la posibilidad de operar como proyecto hidroeléctrico. Del embalse de esta presa se trasvasaría el volumen en tránsito a la cuenca del río Fuerte y se regularían en la presa complementaria Choix -obra que estaría a 40 km al noreste de la Presa Miguel Hidalgo- utilizando un largo túnel de difícil acceso y construcción.

Del embalse de la Presa Choix, los volúmenes se conducirían al Proyecto Huites mediante un canal. A partir de esta presa, las características fisiográficas nuevamente se tornan favorables para comunicar con obras hidráulicas superficiales -canales y algunos diques- las presas en operación sobre los ríos El Fuerte (Miguel Hidalgo), Arroyo Cuchujaqui (Josefa Ortiz de Domínguez), Mayo (Mocuzari) y Yaqui (Oviachic) o en su caso, construir nuevos canales a mayor elevación para incorporar más tierras al riego.

De modo que la intrincada conformación de la Sierra Madre Occidental, al complicarse aún más desde el parteaguas que divide las cuencas de los ríos Elota y Culiacán-Tamazula, impide aplicar los conceptos y lineamientos de diseño y proyecto iníciales; a grado tal, que las estructuras hidráulicas requeridas, por su magnitud, procesos de construcción y costos, resultan poco viables. Esta situación especial, conduce a revisar-aplicar criterios, normas y planteamientos acordes a las características físico-técnicas regionales para facilitar la continuidad del Plhino del centro de Sinaloa al sur de Sonora, aunado a ponderar-evaluar la ejecución de algunas presas complementarias y nuevos proyectos hidroeléctricos.

Entidad Río Proyecto a
Nivel, msnm Conducción, km
Sinaloa-Centro Elota Corochis 320 Túnel de 18.5
Sinaloa-Centro Culiacán-Humaya Guatenipa b 400 Bombeo y Canal
Sinaloa-Norte Sinaloa Toahayana b 400 Túnel de 40 km
Sinaloa-Norte El Fuerte-Choix Choix b 400 Derivación en Canal
Sonora-Sur Mayo Huajura 500 Central Hidroeléctrica
Sonora-Sur Yaqui Batahui 510 Central Hidroeléctrica

a    De los proyectos adicionales, la Presa Corochis es necesaria para seguir con el trasvase. Los Proyectos Hidroeléctricos: Batahui (450 MW) y Huajura (160 MW) son obras independientes y muy convenientes para apoyar el Complejo de Desarrollo del Pacífico Noroeste.

b    Debido a los grandes costos y obras asociadas de transferencia, estas presas podrían no considerarse. Sólo que por sus ventajas técnicas y conveniente ubicación, serían atractivos proyectos hidroeléctricos para incrementar la disponibilidad de energía limpia y renovable en el Complejo de Desarrollo del Pacífico Noroeste.

De acuerdo a estas condiciones, a partir de la Presa Corochis se aprovecharán las presas en operación, a fin de avanzar la interconexión con túneles hasta donde así resulte viable y conveniente. Es necesario precisar, que las actuales obras hidráulicas no siguieron un plan integral de coordinación y enlace, sino se construyeron según las características propias de los ríos donde se sitúan, sin basarse en un concepto y plan preestablecido que a futuro permitiera unir los embalses con instalaciones y equipos económicos.

Es decir, las presas en operación se concentran dentro de su área de influencia y tienen elevación variable, lo cual imposibilita aprovechar y conservar una carga hidrostática que facilitara su posterior enlace. La excepción, son las obras hidráulicas de los ríos El Fuerte, Mayo y Yaqui, pero no se pueden coordinar con las presas situadas al sur, hecho que exige implementar otras acciones y más obras de apoyo regionales.

Entonces, a fin de reordenar e impulsar el Plhino del centro de Sinaloa al sur de Sonora, es indispensable aprovechar la Presa El Comedero sobre el río San Lorenzo e interconectarla por medio de un túnel de 18 km con la nueva presa Corochis sobre el río Elota. De tal manera que el caudal en tránsito se controle y regule en el embalse de la Presa El Comedero para seguir con conceptos de proyecto adecuados a la transferencia de los 220 m3/s. De esta obra hidroagrícola, el trasvase continuará a la Presa Sanalona construida sobre el río Culiacán-Tamazula, uniendo ambas presas en operación con un túnel de 23 km.

Es importante revisar y en su caso actualizar-modernizar todas las obras e instalaciones hidráulicas en funcionamiento para evitar pérdidas, derrames o fugas, tanto de los escurrimientos y captaciones de sus propias cuencas como de los volúmenes en tránsito hacia el noroeste. El propósito es no desperdiciar ningún metro cúbico de agua, que en estas regiones del país adquiere un elevado valor económico-productivo (1 m3/s = 3 150 hectáreas)… De necesitarse más volúmenes en los distritos agrícolas del centro de Sinaloa, podrían destinarse caudales suplementarios para incrementar la superficie bajo riego.

Con base a lo anterior, la conducción consistirá esencialmente de: Canales, que por sus dimensiones equivaldrán a reproducir al río Santiago pero con desarrollo paralelo a la costa, desde el valle de Culiacán hasta las presas de Sinaloa-norte y Sonora-sur; Diques múltiples para formar donde se requiera pequeños embalses de regulación y derivación; Puentes-canales, tajos y algunos pequeños túneles y Plantas de bombeo para recuperar -según la pendiente de diseño- la presión hidrostática y fluya el agua sin problema Este sistema de obras e instalaciones hidráulicas, hará factible el trasvase de agua al Valle del río Yaqui.

Por consiguiente, de la Presa Sanalona la conducción en canal tendrá un rumbo noroeste y paralelo a la carretera-autopista federal 15 durante aproximadamente 150 km hasta la población de Guamuchil. Pasará aguas arriba de la Presa Eustaquio Balbuena a través de un puente-canal sobre el río Evora para retomar el trazo principal del ferrocarril Guadalajara-Mexicali. En la intersección con el río El Fuerte (kilómetro 250 de la longitud acumulada), lo cruzará con otro puente-canal en las inmediaciones de la población de San Blas, donde girará al norte para seguir con una dirección noreste por el desarrollo del mismo ferrocarril.

En el kilómetro 300 de la conducción, atravesará el límite estatal Sinaloa-Sonora y seguirá por la colindancia norte de la carretera-autopista federal 15 y el ferrocarril del Pacífico hasta Navojoa. Cruzará el río Mayo en las proximidades de la Presa Mocuzari (kilómetro 390) para proseguir hasta Ciudad Obregón con un rumbo-trazo parecido al de la carretera y el ferrocarril; población donde concluirá la distribución de los volúmenes transferidos desde el norte de Nayarit y sur de Sinaloa, con posibilidades de continuar allende del río Yaqui para agregar nuevas tierras al riego de su margen-planicie derecha.

La longitud total de la conducción desde la Presa Sanalona al Valle del Río Yaqui es de alrededor de 460 km, integrada básicamente con canales, diques, puentes y algunas plantas de bombeo (dos o tres). Al principio, el imponente Río-Canal Tamazula-Yaqui de sección trapecial y, de ser posible, revestido para aumentar su eficiencia hidráulica y evitar así, pérdidas por filtraciones y fugas, tendrá una capacidad de 220 m3/s la cual se reducirá conforme avance al noroeste, debido a las derivaciones complementarias para optimizar los distritos de riego comprendidos entre las ciudades de Culiacán, Sinaloa y Obregón, Sonora.

Además, este río-canal artificial funcionará como una versátil y económica hidrovía, con lo cual se ampliarán los existentes sistemas y vías de comunicación. De modo que al disponerse de modernas carreteras, trenes eléctricos y canales de navegación, la región se convertirá en ejemplo para otras zonas del país, donde se prevé la construcción de importantes obras de infraestructura hidroenergética y de comunicaciones. Por lo mismo la alta producción agrícola que se obtendrá con la realización del Plhino se transportará, distribuirá y exportará a los mercados de la vertiente y cuenca del Pacífico de forma rápida.

Así, en los valles de los ríos Yaqui y Mayo se podrá contar con agua abundante para irrigar una superficie adicional de 470 000 ha. Esto presuponiendo que en el estado de Sinaloa se incorporen al riego del orden de 230 000 ha entre los ríos Culiacán y El Fuerte, además de las 100 000 ha que se agregarán en la zona sur de Sinaloa (entre los ríos Baluarte y Piaxtla). En Nayarit-norte, al contar con el caudal íntegro del río Santiago y el 30% de los volúmenes de los ríos San Pedro y Acaponeta, estas aportaciones serán suficientes para abastecer sus múltiples lagunas litorales, tierras de cultivo y suministrar agua a los futuros centros urbanos, industriales y comerciales del Complejo de Desarrollo del Pacífico Occidental.

Estado Región o Distrito Objetivos y Funciones 1
Proyectos y Obras 2
Nayarit-Norte San Pedro-Acaponeta Agua, Energía, Agricultura, Piscicultura, Acuicultura PH Nayar y Tenepanta. Presas: Ixcatán,  Rodrigo y Carolina
Sinaloa-Sur Baluarte-Mazatlán-Piaxtla Agua, Energía, Comercio, Turismo, Riego de 100 000 ha Presas: Patricia, Paola, Fernanda y Corochis
Sinaloa-Centro Elota-Culiacán-Evora Agua, Energía, Acuicultura y Riego de 100 000 ha Presas: El Comedero, Sanalona y Conducción en Canal
Sinaloa-Norte Valle Sinaloa-El Fuerte Agua, Riego de 130 000 ha, Energía, Turismo, Navegación Canal revestido, Diques, Puentes, Plantas de Bombeo
Sonora-Sur Valle Mayo-Yaqui Agua, Riego de 470 000 ha, Energía, Turismo, Navegación Obras Hidráulicas, Embalses, Centrales Hidroeléctricas

1   Los proyectos serán de multifunciones: Suministro de Agua, Generación de Energía, Irrigación, Control de Inundaciones, Turismo, Navegación, a fin de diversificar la participación y rentabilidad del Plhino.

2   Los beneficios adicionales serán: Múltiples Fuentes de Empleo, Inversión Productiva, Patrimonio Regional y Nacional, Oportunidades de Desarrollo en Contraposición a las Actividades Ilícitas…

Por lo que al distribuirse racionalmente los volúmenes controlados y almacenados por las nuevas presas San Pedro-Rodrigo, Acaponeta-Carolina, Baluarte-Patricia, Presidio-Paola, Piaxtla-Fernanda (con caudal conjunto de 220 m3/s) y Elota-Corochis, además de las ya existentes: San Lorenzo-El Comedero y Tamazula-Sanalona, intercomunicando sus lagos artificiales con siete túneles que tendrán una longitud total de 156.50 km, los cuales también aportarán volúmenes subterráneos al funcionar como galerías de infiltración, los estados de Sinaloa y Sonora podrán aumentar-incorporar al riego cerca de 800 000 ha.

Si en una segunda etapa los caudales del río Santiago se derivan al noroeste, se agregarían-incorporarían otras 650 000 ha. De ser así, la superficie total por irrigarse en Sinaloa y la región sur de Sonora sería de 1 450 000 ha.

Conducción en Túnel:  156.50 km. Incluye siete túneles, seis presas nuevas y dos en operación.

Conducción en Canal:  460 km. Se forma con canales, diques, puentes-canales, tajos y plantas de bombeo.

Conducción Total (Túneles y Canales):  616.50 km. Equivale al 67% de la distancia entre los ríos Santiago y Yaqui.

Recuperar la autosuficiencia de alimentos en el país exige proyectos y obras de infraestructura acordes a la magnitud de las carencias, necesidades y obstáculos por vencer. Desde luego las inversiones de capital y energéticas son cuantiosas. Sólo que México, de continuar supeditado a la creciente importación de alimentos, será más vulnerable, dependiente e inestable, lo que compromete su unidad y posteridad… Con recursos monetarios equivalentes a la compra de alimentos de únicamente un año (14 Gigadólares), el Plhino se construiría en todas sus etapas, aunado a que sus obras se caracterizarían por tener alta competitividad, plena participación y larga vida útil.

Sin duda los desafíos y cuestionamientos entorno a este proyecto son diversos, pero la falta de agua en zonas con ricas tierras susceptibles de incorporarse al riego para convertir lo árido y agreste en enormes, productivos y rentables vergeles para apoyar al país a recuperar-cubrir la creciente demanda de alimentos y productos agropecuarios, piscícolas y acuícolas se resolverán con ingenio, audacia, visión y decisión.

El Plhino del Siglo XXI no es una quimera o meta inalcanzable. Es un necesario concepto de progreso interestatal.

Con nuevos criterios y modernas obras de infraestructura hidroenergéticas bien planificadas y programadas se hará realidad este ambicioso, anhelado y magnánimo proyecto integral; que por su magnitud y funciones, convertirá lo inaccesible y abrupto de la Sierra Madre Occidental en un equitativo-compartido desarrollo de abasto de agua, generación de energía eléctrica, irrigación, comunicaciones…, donde la vasta producción de alimentos y los múltiples beneficios que aportará serán su estandarte.

México, D.F. Octubre de 2007

Nota: Compendio del Proyecto Mareomotriz Montague, Baja California Norte y Sonora (Plhino. Región-Extremo Noroeste) se presenta en los enlaces: http://www.mexicotm.com/interior/p/p_pp_noreste02.html y  http://www.mexicotm.com/interior/mp/mp_mapa15.html


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